El bombero José Antonio Rodríguez, de 49 años, natural de Madrid pero residente en Menorca, se ha estrellado con su helicóptero cuando intentaba apagar un incendio forestal en La Cuesta de Parres, una zona escarpada y de difícil acceso del Principado de Asturias.
Hoy las cosas han cambiado. Los bomberos del mar están constantemente preparados para salir con sus buques y helicópteros a velar y ayudar a marinos y pescadores.